Guía: Cultivo de Chícharo.

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El chícharo, arveja o guisante (Pisum sativum L.) pertenece a la familia de las leguminosas y a la subfamilia de las fabáceas. Se han encontrado evidencias de su uso en vestigios que datan de 10 mil años hallados en Anatolia, Irán, Grecia y Palestina, su origen no está claramente definido, es muy probable que esta especie provenga de regiones asiáticas (quizás del Cáucaso o de Persia) donde se extendió a Europa.

Se consume tanto crudo como cocido, es de sabor suave y agradable, además es fácil de combinar con otros alimentos y contiene una gran cantidad de proteínas. Lo que se consume es el contenido de la vaina, es decir las semillas verdes y redondas, y aunque es muy poco ferecuente también las podemos encontrar en color amarillo.

 

 

Particularizando en sus beneficios, los chícharos son excelentes en la alimentación infantil, gracias a su aporte de vitaminas A, C, B9, proteínas y carbohidratos, además son bajos en grasas, también poseen vitamina B1, fibra y una cantidad importante de hidratos de carbono y grasas, que proporcionan una dosis óptima de energía.

La planta de chícharo es una hierba anual, decumbente (con tendencia a echarse sobre el suelo) o trepadora por zarcillos, su tamaño va desde plantas bajas (menor de 40 cm), semi-trepadoras (entre 80 cm-1m), trepador o enrame (de 1,5-2 m). Prefiere zonas templadas y subtropicales con invierno definido, crece mejor con temperaturas entre 16 y 20°C y soporta temperaturas de 5 a 35°C. Las plántulas son tolerantes a heladas, sin embargo, durante la floración y formación de vainas, las heladas aún ligeras, resultan dañinas.

Se recomienda realizar una siembra indirecta, aunque también se puede sembrar directamente en el sustrato. Con ayuda de semilleros de plástico (o foamy) vamos a colocar un sustrato adecuado, como polvillo de coco o peat moss, pon una semilla por cavidad con el sustrato previamente humedecido, cubre la semilla y coloca el germinador en un lugar oscuro. Mantén el sustrato siempre húmedo, recuerda que los riegos son solo con agua.

 

 

La semilla germina por lo general en una semana, dependiendo de la variedad y las condiciones ambientales, puedes ver emerger tu planta entre los primeros 7 y 10 días, lo primero que verás serán los dos cotiledones los cuales alimentarán a la plántula unos días.

 

 

Se realizará cuando las plantitas tengan 10 o 15 cm de longitud y de 3 a 6 pares de hojas.

El método de cultivo hidropónico recomendado, es el cultivo en sustrato, este tiene que ser franco o franco arenoso, por ejemplo, fibra de coco (en la presentación de bolis), perlita o vermiculita.

 

también puedes ocupar las mezclas como la mezcla 3 y la mezcla 13 o puedes crear tu propio sustrato

Para realizar el trasplante nos ayudaremos de un abate-lenguas para sacar nuestras plántulas del semillero, tratando de no lastimar la raíz.

Con ayuda de una pala de jardín desinfectada y limpia o con tu mano (que debe estar limpia para evitar infecciones en la planta) haremos un hoyo en el sustrato, previamente humedecido y colocaremos nuestra plántulita, para terminar regando un poco con la solución nutritiva o con agua.

La distancia de siembra será de entre 10 y 30 cm entre planta y planta.

A los 7-15 días después de haber realizado el trasplante, debes colocar a lo que se le conoce como “tutor” para ayudar a tu planta con su crecimiento y al aprovechamiento de luz, el cual se puede realizar con rafia agrícola que está elaborada con protección UV para resistir la intensidad solar.

 

 

Es una actividad muy importante ya que da fuerza y vigor a tus plantas, mejorando la floración y el desarrollo.

 

 

Esta se realiza cada que revises tu cultivo (por lo menos cada semana) ya que hayas realizado el trasplante, deberás comenzar con tu poda de hojas, eliminando solamente las hojas enfermas y en senescencia (hojas viejas).

Se deben de eliminar hojas cloróticas o amarillentas, que presenten daños en tonalidades pardas, necrosis o coloración negra, provocada por muerte celular o algún hongo. Al eliminar este tipo de hojas estimulamos a las plantas para que tengan un mayor desarrollo vegetativo, una buena ventilación y desechamos cualquier posible infección por esporas, bacterias y virus que pudieran contaminarlas.

El corte de estas hojas se realizará sólo con ayuda de unas tijeras para podar limpias y desinfectadas, cortando la hoja desde la parte más cercana al tallo principal ligeramente inclinado hacia él.

Este tipo de poda está enfocada en la calidad del producto y en el saneamiento de tu cultivo.

Se deben cortar las flores y frutos dañados que estén en mal estado, enfermos o con malformaciones.

Dependerá del tipo de suelo y de la fecha de siembra. Normalmente los suelos arenosos necesitan riegos más frecuentes, aunque se recomienda que sean moderados. Puedes utilizar sistemas de riego por goteo, medio de cintilla o el riego por goteo localizado.

 

 

Las épocas de recolección se realizan a partir de los 85 días después de la siembra, sin embargo, depende también de las características climáticas de la zona y la precocidad de la variedad. Cuando se inicia la recolección de las vainas con los granos tiernos, se debe realizar con frecuencia, cada 4 o 5 días, eligiendo las vainas llenas. El punto óptimo de calidad del chícharo es cuando las vainas están llenas de granos bien desarrollados, pero aún tiernos y jugosos.

 

 

Cosecha de semilla: La producción de chícharo seco (semilla), se realiza cuando las vainas están secas y las plantas tomen un color amarillo de forma natural.

 

 


 

Siembra Indirecta
Semillas

 

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